
Obsesionado en la consumación del tiempo; vislumbro en él una línea de trabajo, una herramienta de creación y un vínculo con sus antepasados. El tiempo es el eje central inconsciente que une todas sus prácticas artísticas siendo el ingrediente para eternizar los instantes de su propia vida. La numerología, el esoterismo, astrología y tarot desempeñan una atracción estética que enriquece su cosmogonía. Basa su estética experimentando contrastes; generados por imagen o sonido encontrando así un punto de diálogo en donde convergen de manera armónica todos sus elementos de trabajo. La renovación continua en la identidad que represente fielmente su estado emocional, hace que su trabajo y persona estén en constante evolución; sumamente sensible, consciente de su búsqueda y sus límites a trabajar.
Agobiado de la existencia, entendió que simplemente ha sido un humano por 29 años.
Ha colaborado con diversos proyectos y artistas del arte contemporáneo en México y el extrajero, tales como; Bárbara Lázara,Tania Solomonoff, Alfredo Salomón, SOMA, Rogelio Sosa, Surplus International, Desbordamientos, Audition Records, Volta, Sounds and Colours, WeOnlyShare, 56kbps, Otoño en Hiroshima, Museo Universitario del Chopo, Museo de Arte Moderno, Laboratoria de Arte Alameda, Ex Teresa Arte Actual, entre muchos más.
A Mareaboba (Mat Hnedy) lo conocí en el VA 1er. Encuentro de Musica Experimental y Arte Sonoro, gracias a la invitación de Juanjose Rivas (Volta) para participar en la parte operativa documental.
Después de ese encuentro entablamos una buena amistad al tener amigos en común, a la par de estar hermanados en lo que aun no defino bien pero es una especie de generación de productores de música que si bien no pertenecemos a las prácticas del arte sonoro tampoco a una electrónica digerible ya que poseemos algunas propiedades de la experimentación tanto técnicas en las herramientas y políticas en lo simbólico; nos encontramos en un limbo extraño.
Esta fotografía en particular pertenece al Festival Nrmal edición 2016, en donde a pesar de haber coincidido su set con la presentación de Battles y Slowdive, existieron varias almas que escaparon a la ola de nostalgia colectiva impartida por la mercadotecnia, decidiendo prestar su cuerpo y oídos a la electrónica mexicana contemporánea.